Los nuevos señor y señora de la casa se merecen sus propias tazas, preparadas en su cajita, junto con su sobre, para poder escribirles una carta y guardarla dentro o incluso hacerles el regalo de boda junto con sus nuevas tazas de casados.
La taza de la señora con su anillo dibujado y la taza del señor con un bigote distintivo de un buen señor.